El villano corporativo, a propósito de las Asambleas
Por estos días pierden su máscara, disfraz o ropaje las mansas ovejas que fungen como el sufrido administrador pero que en realidad son lobos, predadores o incluso personas que corren barreras éticas, morales o incluso legales (para no llamarlos otra cosa).
Me refiero, sin hacer alusión a ningún caso en particular (y al que la caiga el guante ..) a aquellos administradores o grupo de administradores de sociedades comerciales que a pesar del deber legal que les asiste no cumplen en debida forma con su obligación legal de ser buenos hombres de negocios, fiduciarios responsables y personas honestas que den cuenta en debida forma de su gestión al frente de un ente societario, donde en muchos casos, tienen doble condición de asociado y director.
Si, me refiero a una variada tipología de personajes que tratan año a año a los asociados con desdén, como si fueran ignorantes, no les dan la información que por ley les corresponde, no conceden del derecho sagrado a un dividendo y se anteponen a los asociados con una supremacía tal que infunden miedo, respeto y temor.
Caso extremo o no (el descrito), sirve como punto de partida para hacer las siguientes reflexiones :
Primero,- lo citaron en debida forma a la Asamblea, o Junta de Socios ?
Segundo,- le tocó recordarle al gerente que debía citar a la reunión ?
Tercero,- le permitieron ejercer derecho de inspección ? Conoció de antemano la información financiera de la sociedad ?
Cuarto,- con la convocatoria (si es que hubo) le remitieron el orden del día ?
Quinto,- hubo reunión, cree usted que habrá ? Y no crea que la pregunta es irrelevante, pues subsisten sociedades sonde ese privilegio de hacer reuniones, invitar a los accionistas, o darles ese “privilegio”, no es con ellas…
Sexto,- Sintió usted algún ambiente hostil durante la reunión?
Séptimo,- Fue tratado con respeto, sus preguntas fueron absueltas?
Octavo,- Se habló de utilidades ?
Noveno,- Sintió usted que luego de irse otro grupo de accionistas se quedaría en “pequeño comité” o que previo a la reunión ya se había cocinado todo?
Décimo,- le quedó claro en que estaba la sociedad y para donde va ?
Si uno o varias de estas preguntas lo dejan pensando, algo no está funcionando en su relación de asociado frente a la sociedad de la cual, mal que bien usted es dueño en parte, y partícipe de utilidades, entre otros derechos.
Saque sus propias conclusiones, pero sobre todo, actúe !
Nota: planear supone elaborar escenarios, algunos de los cuales no son siempre los deseables. Pero hace parte del ejercicio contemplarlos. Sabe usted que es una reunión por derecho propio ? Déjeme sus comentarios.